mi casa es un barco
un pequeño barco geométrico, blanco
lleno de luz y de viento
en las noches de tormenta se balancea
como si no hubiera un mañana
y todo augura un naufragio perfecto
del que nunca sabemos si saldremos a
flote
las bañistas corren a resguardarse
y algún marinero adormecido
despierta sobresaltado -desnudo-
en mitad de la noche
me asomo por una escotilla
y espero la gran ola inmóvil
que -tantas veces- anuncia un final
próximo
en todos mis sueños
pero el final nunca llega
y siempre ando empezando principios
círculos
esferas
bucles
la vida en una espiral infinita
de tormentas y vientos y luces
que zarandean sin descanso
mi pequeño barco geométrico
* Imagen del cuadro Tormenta de nieve, de William Turner.